La agricultura orgánica ha dado un salto cuantitativo con los años y ser ajenos a esta tendencia es dejar de escapar una oportunidad de negocio en mercados internacionales. Tal es así que se prevé que este año el Perú alcance las 700 mil hectáreas de producción orgánica, cifra distante de las casi 340 mil en 2011.
Qué es la agricultura orgánica
El concepto de agricultura orgánica exige el cumplimiento estricto de las normas establecidas en las técnicas aplicables. Entre las más comunes y aceptadas se encuentran las siguientes:
Rotación De Cultivos
La rotación de cultivos implica cambiar de especie en el mismo campo temporada tras temporada. Esta técnica agrícola también puede incluir un periodo de barbecho dentro de un determinado intervalo de tiempo.
Abono Verde
La mezcla de plantas verdes con el suelo lo enriquece con materias orgánicas, y nitrógeno en particular. También aumenta los niveles de humedad y añade nutrientes para los microorganismos, mejorando así la calidad del suelo. Este método de agricultura orgánica también reduce la infestación de las malas hierbas.
Abono Animal
Esta práctica enriquece el suelo con componentes naturales procedentes de animales, ya sea en bruto o compostados (excluyendo los subproductos de la matanza). Sin embargo, existen restricciones, ya que el material no debe contener ningún aditivo sintético, el suelo debe ser analizado antes de las aplicaciones y este abono sólo se permite al menos tres meses antes de la cosecha.
El abono compostado es preferible ya que su volumen es más compacto y contienen menos patógenos y potenciales contaminantes.
Manejo integrado de malas hierbas en la agricultura orgánica
Los productos agroquímicos pesados no están permitidos en la agricultura orgánica. Por ello, el control de las malas hierbas se realiza a través de otras opciones del manejo integrado de malas hierbas (prevención, biológica, física y cultural).