«Mis padres nos han educado en la ciudad, ellos no querían que estemos en el campo. Es por ello que al campo sólo íbamos en las vacaciones o los fines de semana. Ya que ellos tenían la mentalidad de que si regresamos al campo, sería con un título profesional para hacer algo. Es así como ingresé a la universidad y acabé microbiología en la Universidad San Cristobal de Huamanga.»
«Empecé en el negocio de la quinua con mi hermana, mi hermano y mi mamá. En el año 88, en el gobierno del expresidente Alan García, nos dió para sembrar productos autóctonos de la zona. Y con ello nos brindó ciertos beneficios, como pagarnos 10 veces más de lo que costaba.»
«Después del gobierno de Alan García, el negocio de la quinua fue bajando nuevamente. Se sembraba poco como para el mercado local nada más. Después, por el año 2013 o 2014 empezó el «boom de la quinua» y se empezó a sembrar con fuerza nuevamente.»